¿Cómo prevenir una embolia cerebral?

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embolia cerebral

La embolia cerebral es una de las causas más frecuentes de infarto cerebral; debido a una interrupción de la circulación de la sangre en los vasos del cerebro.

Tanto los animales como las plantas y el ser humano, requieren del oxígeno para poder vivir.

Cuando hay una interrupción del oxígeno que viaja a través del torrente sanguíneo hacia nuestros sistemas, se puede provocar muerte celular o una interrupción en el funcionamiento de los órganos.

A esta interrupción de oxígeno se le llama embolia, siendo la pulmonar y la cerebral las más conocidas.

Las enfermedades cerebrovasculares según señala la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el año 2015 representaron 6.7 millones de fallecimientos a nivel mundial. Convirtiendo a este tipo de padecimientos en una de las causas de muerte más frecuentes en el mundo.

En este artículo describiremos qué es una embolia cerebral, cuáles son sus causas, factores de riesgo, síntomas principales, formas de diagnóstico, tratamiento y cómo prevenirla.

¿Qué es una embolia cerebral?

Es un trastorno que impide la correcta oxigenación de las células del cerebro. Se produce cuando una partícula que puede proceder de cualquier parte del organismo viaja por el torrente sanguíneo al cerebro y bloquea la circulación de alguna arteria cerebral.

Cuando el cerebro no recibe los recursos que necesita para funcionar correctamente pueden producirse accidentes cerebrovasculares isquémicos; generalmente producidos por coágulos de sangre.

Aunque cualquier persona puede sufrir una embolia cerebral, son más frecuentes en mujeres y personas que superan los 65 años. Ocurriendo con mayor frecuencia conforme se incrementa la edad.

Tipos

A la partícula que viaja por el torrente sanguíneo y genera el bloqueo en el cerebro se le denomina émbolola embolia cerebral se puede clasificar según su tipo:

Cardíaco: Cuando se incrementa el espesor de la sangre se forma un coágulo sanguíneo. Generalmente dentro de las venas o arterias del sistema circulatorio que pueden desprenderse al torrente sanguíneo y llegar al cerebro.

Graso: La acumulación de grasa en forma de placa o depósito puede desprenderse y viajar hacia el cerebro.

Aéreo: Se presenta cuando la obstrucción de la circulación de la sangre a través de las arterias, y la correcta oxigenación del cerebro es causado por una burbuja de aire en el torrente sanguíneo.

Séptico: Se determina cuando la obstrucción se genera por la acumulación de tejido o material purulento, producto de una infección.

Tisular: Ocurre cuando un fragmento de tumor o de tejido canceroso se desprende y viaja hacia el cerebro obstruyendo a su paso la circulación de sangre.

Síntomas

Los síntomas pueden variar según la gravedad y el área del cerebro afectada. Pero los síntomas más comunes son:

Parálisis en la cara: Existe una pérdida súbita de fuerza en los músculos de un lado de la cara. Debido a esto el paciente presenta la boca o el ojo caídos.

Debilidad en los brazos: Una persona que está sufriendo una embolia cerebral no es capaz de levantar ambos brazos y mantenerlos en el aire. También puede, ser incapaz de mover o levantar objetos debido a la debilidad que siente en ellos. O sentir que un brazo está dormido.

Dificultad al hablar: La persona puede presentar dificultad para articular palabras, hablar o expresarse coherentemente. Algunos pacientes pueden perder la capacidad de hablar, aun estando conscientes.

Existen otros síntomas que requieren atención pero que no son tan comunes como:

  • Mareos
  • Pérdida de equilibrio o coordinación
  • Caídas sin causa aparente
  • La visión borrosa
  • Problemas para caminar
  • Dificultad para tragar la comida
  • Dolor de cabeza repentino e intenso de causa desconocida
  • Irritabilidad
  • Problemas para controlar los esfínteres
  • Convulsiones

La Asociación Nacional de Accidente Cerebrovascular de Estados Unidos ha diseñado una prueba sencilla llamada FAST (por sus siglas en inglés) para recordar los principales síntomas de un accidente cerebrovascular.

Face (cara): Pedir a la persona que sonría. Y fijarse si tiene un lado de la cara caído.

Arms (brazos): Pedir a la persona que levante los dos brazos. Para verificar su fuerza, movilidad o sino lo siente dormidos.

Speech (habla): Pedir a la persona que repita una frase sencilla. Verificando la facilidad y coherencia del habla.

Time (tiempo): Si se observa alguno de estos signos o síntomas, se debe hablar al número de emergencias inmediatamente.

Causas y factores de riesgo

A pesar de que no se conocen todas las causas que pueden originar una embolia cerebral. Los especialistas concuerdan en que un estilo de vida desequilibrado, la mala alimentación el sedentarismo y el estrés son aspectos que aumentan el riesgo de provocarla.

Pero existen también factores de riesgo que aumentan de forma importante la probabilidad de sufrirla como:

  • La obesidad
  • La drogadicción
  • El uso de anticonceptivos o uso excesivo de estrógenos.
  • El tabaquismo
  • Estar embarazada, cursando el tercer trimestre.
  • Niveles de colesterol elevados.
  • Diabetes
  • Cáncer
  • Infección de oído, cara o cuello.
  • Traumatismo craneal

Tratamiento

El accidente cerebrovascular embólico requiere un plan de tratamiento de emergencia, dirigido a disolver el coágulo o extirpar el émbolo de la arteria y restablecer el suministro de sangre al cerebro.

Para lograrlo el médico a cargo puede utilizar medicamentos anticoagulantes orales o intravenosos. También puede usar un catéter para administrar medicamentos directamente al cerebro o para eliminar el coágulo.

El médico emplea una de las siguientes pruebas para diagnosticar y tratar una embolia cerebral:

  1. Tomografía computarizada: Utiliza un equipo de rayos X especial para mostrar con mayor detalle los vasos sanguíneos del cuello y cerebro.
  2. Imagen de Resonancia Magnética (IRM): Es una prueba que a través de ondas de radio detecta el tejido cerebral que haya sido dañado por un accidente cerebrovascular o una hemorragia cerebral
  3. Dúplex carotídeo: Es un examen de ultrasonido que muestra el flujo sanguíneo a través de las arterias carótidas.
  4. Angiografía cerebral: Es un procedimiento que utiliza un tinte especial (material de contraste) y rayos X para ver cómo fluye la sangre a través del cerebro.
  5. Ecocardiograma: A través de ondas de sonido, determina la ubicación de cualquier coágulo de sangre que pudo haber viajado desde el corazón al cerebro.

Es posible que se requieran procedimientos quirúrgicos que ayuden a prevenir episodios adicionales. Estos incluyen la endarterectomía carotídea que consiste en abrir las arterias estrechas que tienen depósitos de placa dentro. Además se pueden colocar stents en la arteria para mantenerla abierta y evitar el estrechamiento.

El tratamiento a largo plazo depende de la causa de la embolia cerebral y a menudo incluye medicamentos para prevenir futuros ataques.

Además de recuperar cualquier función motora o cognitiva que haya sido afectada por el accidente cerebrovascular a través de fisioterapia y terapia del habla.

Prevención

La mejor forma de prevenir una embolia cerebral es adoptar un estilo de vida saludableEstas son algunas recomendaciones para evitar un accidente cerebrovascular.

Conocer y controlar la presión arterial

La hipertensión provoca un exceso de trabajo para el corazón y las arterias, lo que deriva en graves consecuencias capaces de favorecer la aparición de una embolia cerebral.

Descartar problemas de sueño

Se recomienda una evaluación nocturna de oxígeno para verificar que el paciente no presente apnea obstructiva del sueño, que es un trastorno en el cual el nivel de oxígeno disminuye de manera intermitente durante la noche.

Se puede presentar una embolia cerebral derivado de una hipoxemia crónica que va haciendo más duras las arterias y llevan a una disminución de oxígeno.

Beber alcohol con moderación o no hacerlo

El alcohol puede ser tanto un factor de riesgo como una medida de protección para los accidentes cerebrovasculares. Sin embargo, beber una cantidad entre pequeña y moderada de alcohol, como una bebida por día, puede ayudar a prevenirlos y disminuir la tendencia a la coagulación de la sangre.

No fumar

Este hábito eleva el riesgo de sufrir accidentes cerebrovasculares para fumadores y fumadores pasivos. El humo del tabaco tiene diferentes efectos en el cuerpo que incluyen el engrosamiento de la sangre, incrementando el riesgo de formación de coágulos y estrechando las arterias. Además disminuye el oxígeno en la sangre.

Conocer y controlar los niveles de azúcar

Si bien múltiples estudios dicen que la diabetes eleva el riesgo de enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia renal, los tratamientos con insulina pueden ayudar a mantener bajo el riesgo.

La diabetes también hace que sea más difícil para el cuerpo responder a una embolia cerebral.

Porque cuando se corta el suministro de oxígeno, otras arterias generalmente pueden servir como desviación. Sin embargo en los pacientes con diabetes, esos vasos pueden estar endurecidos u obstruidos con placa. Lo que hace que sea más difícil para la sangre llegar al cerebro.

Llevar una dieta rica en frutas y vegetales

Según especialistas, la mejor manera de evitar una embolia cerebral es llevar una dieta basada en plantas, que incluya: vegetales, lentejas, frijoles, semillas, granos enteros, frutas y nueces.

Una de las razones por las que las dietas basadas en plantas protegen contra los accidentes cerebrovasculares se debe a la fibra que se encuentra en los alimentos vegetales integrales.

Por lo que es importante esforzarse por incluir una variedad de frutas, verduras, hierbas y especias en cada comida.

Complicaciones

Una embolia cerebral puede, en ocasiones, producir discapacidades temporales o permanentes. esto va a depender de la cantidad de tiempo que el cerebro no recibe flujo sanguíneo y de que parte haya sido afectada.

Las complicaciones pueden ser:

  • Parálisis o pérdida del movimiento muscular.
  • Problemas emocionales.
  • Edema cerebral.
  • Dificultad para hablar o tragar.
  • Convulsiones.
  • Dolor.
  • Pérdida de memoria.

Conclusión

Se considera que una embolia cerebral es una emergencia médica que pone en peligro la vida y se debe buscar atención médica inmediatamente si se presenta alguno de los síntomas que se exponen en este artículo. La recuperación puede ser un proceso largo y arduo. Sin embargo un estilo de vida saludable que incluya ejercicio, una alimentación balanceada y una supervisión médica periódica son acciones que pueden prevenir una embolia cerebral.